top of page

AVENTURAS: SOCORRO A MENESTEROSOS

PRIMERA PARTE

Capítulo IV: Don Quijote, al salir de la venta, se encuentra con un labrador azotando a su criado porque supuestamente el criado le había robado ovejas al labrador. Don Quijote interviene e intenta mediar en la situación. Después de escuchar las dos versiones de los acontecimientos, Don Quijote propone que si en verdad el criado había robado ovejas, este la debía su sueldo de dos meses, pero si el criado decía la verdad cuando argumentó que se le habían perdido, el labrador debería dejar de azotarle y comprarle unos zapatos nuevos al criado ya que los que tenía estaban hechos jirones y en compensación por los azotes.

Capítulo VIII: Don Quijote y Sancho Panza en el camino se encuentran a unos frailes con varios carros en los cuales iban unas damiselas. Don Quijote pensó que las habían secuestrado y les dice que suelten a las damiselas, que Don Quijote pensaba que eran princesas. Tras varias amenazas, Don Quijote carga contra uno de los frailes desatando una pelea, mientras Sancho aprovecha para robar el dinero de los frailes. Estos, al verle, se abalanzaron contra Sancho para pegarle. Mientras, Don Quijote le decía a la “princesa” que como él la había salvado tenía que ir a a contarle lo sucedido a Dulcinea. Inmediatamente después, otro fraile al oír a Don Quijote lo desafía a una pelea de espadas, en la cual Don Quijote sale victorioso. Le dijo al vizcaíno que también le diga a Dulcinea que fue derrotado por Don Quijote.

​

Capítulo XXII: Don Quijote y Sancho se encontraron con unos presos y sus carceleros. El caballero preguntó el porqué de su condena y estos, uno por uno, le contaron los motivos. Tras oírlos, don Quijote decidió liberarles por no parecerle suficientemente graves. Con esto se desencadenó una lucha entre prisioneros y comisarios, de la que salieron victoriosos los presos. Tras esto don Quijote y Sancho fueron apedreados y saqueados por los liberados porque no querían ir al Toboso a contar la hazaña a Dulcinea.

​

Capítulo XXIX: Sancho contó al cura, al barbero y a Dorotea que había encontrado a don Quijote desnudo y casi muerto de hambre y que le había confesado que no vería a su amada hasta que fuera un famoso caballero. Acordaron que Dorotea se hiciera pasar por Micomicona, una princesa de los libros de caballerías, y que pidiese a don Quijote que matara a un gigante que le había robado su trono. El caballero accedió a la petición y siguió a Dorotea, que iba en la mula del cura. Se encontraron por el camino con el cura, el barbero y el loco que fingieron tener un hallazgo fortuito.

​

​

SEGUNDA PARTE

Capítulos XXIX y XXX: En estos, sancho está a punto de convertirse en gobernador de una ínsula. Don Quijote le da unos consejos, ente ellos los siguientes que hablan sobre la ayuda a los más necesitados:

  • No debía juzgar algo sin conocerlo profundamente.

  • Que tenga más compasión por un pobre que por un rico.

  • En caso de aplicar la ley debía hacerlo por justicia y no por corrupción.

  • Si algún día juzgara a un enemigo, no lo haría con venganza.

  • No debía meter sus sentimientos en un caso ajeno.

  • A quien haya de castigar con obras, no debe tratar mal con palabras.

  • Al culpado que esté bajo su jurisdicción le tendría piedad y clemencia. 

 

​

​

​

labrador.jpg
bottom of page